Me llamo Luis Sánchez y voy a contar en unas líneas, mi
experiencia como catequista en estos tres últimos años.
La verdad, es que ha sido muy bonita y gratificante, porque
poder transmitir experiencias, dar a conocer la vida de Jesús a los niños e ir descubriendo
todo lo relacionado con la Iglesia y los primeros cristianos, me hace sentir muy bien conmigo mismo, además
de contribuir a una de las tareas que Jesús nos encomendó a los cristianos.
Tengo que decir también que estoy acostumbrado a trabajar con
niños, puesto que trabajo en un colegio y sé por experiencia que son muy
agradecidos, sinceros y que me han enseñado tanto como yo a ellos.
Los dos últimos años han sido muy peculiares para mí, puesto
que me ofrecí para darle catequesis a mi hijo y a mi sobrino que iban a tomar
la comunión. Esto me ha servido para conocer un poco mejor a mi hijo, en un
ambiente y un contexto diferente al normal del día a día de un padre con su
hijo, además de seguir más de cerca su
preparación para recibir este sacramento tan importante que es la Comunión.
No puedo por menos que citar a mis compañeras catequistas
que me han ayudado y facilitado mucho mi trabajo.
Para concluir, quiero decir que me ha gustado vivir esta
experiencia, que se la recomiendo a todo el mundo porque es muy bonita,
agradecida y creo que deja una bonita huella en los niños con los que trabajamos, que les
acompañará toda la vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario